viernes, 16 de agosto de 2013

Un/a amigo/a:

Un/a amigo/a no es parte de ese número de tres cifras que aparece en tu facebook, un/a amigo/a es quien cuando hace dos semanas o un mes que no sabe de ti, te llama para saber si estás bien.

No es quién te cuenta sus problemas cuando le llamas, es quien después de haberle explicado tus problemas y después de que te haya aconsejado, te cuenta los suyos después de haber esperado a que le preguntaras.

A un/a amigo/a se le puede olvidar un año no felicitarte por tu cumpleaños, pero tiene la obligación y el deber moral de felicitarte (con correspondientes disculpas) dentro del plazo de una semana después de la fecha. Y lo hace.

Un/a amigo/a no te pide nada, te dice que le falta algo y espera que, si te va bien, se lo des/prestes o ayudes a conseguir.
Del mismo modo, da, presta o ayuda a conseguir lo que te hace falta si sabe que lo necesitas (a mayor necesidad, mayor implicación).

A un/a amigo/a no tienes que irle detrás diciéndole que lea tu blog, que lo comparta o que le dé a "like" o "me gusta", él/ella lo hace con sumo gusto porque aprecia lo que haces y quiere tu triunfo como si fuera el suyo propio. Si es preciso moviliza familia, novio/a, otras amistades o a quien le sirve el café con leche por las mañanas para que se pase a leer tu maravilloso blog.

Un/a amigo/a no es quien piensa que un vestido/traje te queda mal y sonriendo te dice "estás divino/a". Tampoco es quien pensando lo mismo en vez de ser sincero trata de hundir tu moral con frases como "te ves como mi padre/madre", "estás demasiado gordo/a para embutirte en eso, me quedaría mejor a mí", "ponte un cinturón que al primer paso te estás pisando los bolsillos", "ese corte de pelo es el que le hice a mi caniche", "escribes peor que mi primo, el que repitió seis años el primer curso de la guardería a la que fue, borracho, manco y con serios daños cerebrales en el área de Broca y en el área de Wernicke (principales áreas cerebrales del lenguaje)"... No. Un/a amigo/a mide sus palabras tanto para hacer malas críticas como buenas. Siempre tendrá en cuenta procurar decir la verdad sin herir tus sentimientos.

Un/a amigo/a te invita a un café sabiendo que por la tarde se queda sin palomitas para ver por internet su película preferida. Valora más tu compañía que el agradable crepitar del maíz estallado, espolvoreado abundantemente con cloruro sódico y rociado con aceite de oliva virgen extra. No, ese es un placer que se dará cuando pueda permitírselo, lo que no puede permitir es que su amigo/a pase un día de sopor laboral con energías a medio gas.

Un/a amigo/a se presta a hacerte de taxista si tu coche se ha averiado. Te guarda el perro, gato, periquito, agaporni, petirrojo, buitre o demás aves, peces, carpas japonesas, esturiones bálticos o iguanas si te vas de viaje.

Un/a amigo/a no tiene súper poderes, pero no los necesita para que tu camino por la vida sea menos dificultoso.

Seguro que esa cifra de "amigos" que en Facebook tenía tres cifras, ahora raramente llegaría a los 10. Por eso, aun ahora, quien tiene un/a amigo/a, tiene un tesoro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario