Lo peor de todo es que pensé que iba en serio conmigo, que podíamos llegar a algo... ¡Y encima tendré yo la culpa!
No logro concentrarme, me aterra pensar que pueda estar con pie y medio fuera de la editorial, por no presentar a tiempo las correcciones, por no lograr una buena definición en las traducciones...
Por andar tan espesa y pensando en lo que no debería me hallo perdida en mí misma y perdiendo mi talento por culpa de algo que nunca debió existir.
Pero tendré encima yo la culpa...
Por creerme lo imposible, por fantasear con lo no probable, con dejarme llevar por lo impredecible y creer en lo inalcanzable...
Y lo pienso y es posible que sea mejor así. Aunque me fastidia pensar en numerosas ocasiones que soy poca cosa, que no soy suficiente, que chicas como Angie son las afortunadas, mientras otras nos conformamos con ser queridas, y no amadas.
Estos días en la editorial han sido bastante... tensos. Notaba el nerviosismo de Felipe lanzándome andanadas de fuego por sus ojos... y en ocasiones los notaba clavándose en mi nuca y atravesándomela hasta proyectarse sobre la pantalla de mi ordenador... ¡Qué horror!
Estoy al borde del abismo...
Otros parecen estar en su salsa... Especialmente Víctor y Angie, quienes parecen estar en lo alto al más puro estilo matrimonio Curie o Bonnie y Clyde. En cambio el resto parece transitar del mismo modo que siempre, como si el injusto enlace patético de esta nueva pareja no les repercutiera en lo más mínimo...
Pero bueno... si Mar siempre parece enfadada, Jesús siempre parece feliz y Pedro siempre parece deprimido... ¿Qué va a cambiar en ellos?
Felipe es el que parece más variable en estos momentos... y me temo que parte de culpa la tenga Víctor.
No sé qué estará tramando... pero no parece nada bueno, ni para mí, ni para los intereses que no sean los de él y Angie. ¡Con lo buena chica que parecía... qué pronto se ha corrompido!
Yo no sé cómo aguanta el resto este enrarecido clima de tensión que corta el aire... pero yo no puedo ni respirar bajo esta atmósfera tormentosa... por lo que posiblemente acabe rindiéndome y largándome de aquí, lejos, lejos...
Y no creo ser culpable de nada de esto.
Dura travesía para Noe |
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