martes, 30 de agosto de 2016

Netbasura, la telebasura de internet.

Puede que no se haya usado el término antes y lo esté acuñando en este preciso instante, pero lo que sí es cierto es que ya desde hace bastante tiempo empieza a flotar por internet un rezumo de basura intragable que va aflorando y calando en la gente poco a poco.

Estaba claro que la sustituta de la caja tonta iba a ser la red tonta, y este artículo va a hablaros de ejemplos de "Netbasura" (o lo antes conocido como "telebasura" o contenido de entretenimiento de bajo [o nulo] nivel cultural/educativo que aparecía por la televisión, esta vez por internet).

Dejando de lado los programas ya existentes en televisión y colgados en la red (que puedan ser considerados o no basura) nos centraremos meramente en lo concerniente a la red.

Por un lado, internet también tiene a sus propias "celebrities", esos personajes (no olvidemos que lo que vemos son interpretaciones y personajes la mayoría del tiempo, que a veces poco o nada coincide con la persona que está exhibiéndose) que te cuentan parte de su vida y quedas enganchado/a a su canal (generalmente de Youtube) como si se tratara de un reality. En efecto, hablo de los "youtubers", chicos/as de por lo general entre 20 y 30 años que nacidos en la era digital crean sus propios vídeos y los editan (o editan vídeos virales de internet) para entretener... no, no nos engañemos, la mayoría no busca entretener sino enriquecerse con los patrocinadores mientras te vomitan una serie de contenido misógino, soez y de poco nivel cultural.

Tengo que reconocer que no todos los "youtubers" son iguales y hay algunos con un gran sentido crítico, gran creatividad e incluso que llegan a tratar de mostrar algo más que su ego, sin embargo son los pocos y, generalmente, los menos seguidos. La tónica es la de mostrar contenido más absurdo, insulso y poco educativo a medida que van teniendo más seguidores. Como si hubieran dado con la clave del éxito, esos jóvenes reparten el opio del pueblo entre insulto y falta de respeto mientras cuentan parte de sus vidas, gustos y vicios. Pero esto ya nos sonará. Hubo una época, antes de que la televisión se convirtiera en un vertedero de vidas quebradas, en la que pusieras la televisión a la hora que la pusieras te pasaban una película de hostias, sangre y sexo, en la que los anuncios de helados parecían escenas de Rocco Sifredi o Nacho Vidal (luego nos echamos las manos a la cabeza cuando vemos lo que ha hecho Torbe... sin comprender que somos nosotros mismos, la sociedad, quienes hemos creado a Torbe), y ahora internet es ese lugar en dónde ver hostias, sangre y sexo a cualquier hora del día.

Insisto en que hay gente muy creativa por internet, no hay que meter a todos en el mismo saco.

La tendencia (como siempre ha sido así) es la de copiar a los Estados Unidos de América. Recientemente el exitoso "youtuber" Rubius copió literalmente un vídeo de un estadounidense que sorteaba montones de premios, juegos y videoconsolas. No sólo este plagio nos genera reminiscencias de la TV, sino su propio contenido en sí, como si se tratara de un concurso, un "fórrate con poco" o algo por el estilo. Ahora se destila el sortear objetos por la red.

Siguiendo con el tema pero cambiando de sujeto, en la red también existen esas especies de documentales patéticos de aficionados y gente que se aburre mucho que hablan de conspiraciones, extraterrestres y vacunas milagrosas contra todo lo existente y por existir halladas por gente que poco o nada tiene que ver con la ciencia (claro, pues la ciencia para estos conspiradores es como el satanismo para la iglesia). Únicamente nombran a la ciencia para hablar de seres de otro planeta, como si ellos nos hubieran traído todo lo que nuestra propia humanidad muy meritoriamente ha ido descubriendo. Nada, quitémosle el mérito a Galileo, Copérnico, Newton, Hubble, Hawking y deGrasse Tyson, a Eddison, Graham Bell (o mejor Antonio Maucci), Marconi, Tesla, los Lumiere... Velázquez, Miró, Dalí, Picasso... Gaudí, LeCorbusier, Rogers, Foster, Calatr... (bueno, casi a Calatrava no) y se lo damos mejor a los extraterrestres, o a personas ficticias que nos salvan cada día de la extinción con sus fantasiosos descubrimientos... o mejor aún: ¡digamos que son todos extraterrestres! Así despejamos todas las dudas que uno pueda tener, que va a ser lo mismo que decir que todo es cosa de Dios, pero sin religión de por medio.

Avistamiento de sirenas, extraterrestres, fantasmas... por la red corren un sinfín de vídeos de baja o media calidad con montones de trucajes, manipulaciones y chapuzas para hacer creer a la gente que este tipo de seres existen (como antaño pasaba con los programas de sucesos paranormales de la televisión). En efecto, la red no queda exenta de esta basura.

Acabaremos (para no alargar demasiado ya el tema) con la hipersexualización de internet.
¿Cómo es posible que el que quiera ver una película o serie libremente por internet tenga que tragarse miles de anuncios grotescos de ofrecimiento de sexo rápido y fácil?
A diario miles de falos nos atizan la cara antes de poder ver nuestra serie preferida, o pechos más grandes que las espaldas de Michael Phelps nos explotan entre ceja y ceja. ¿Por qué? ¿Tan beneficioso es? ¿Por qué no hay una ley que regule ese exceso?
Es que basta con imaginar la escena de una familia tratando de ver "Buscando a Nemo" y se encuentren con Kunta Kinte erecto para darse cuenta que algo está fallando.

El contenido de internet debería estar más regulado, pensemos que la gente que accede a la red cada vez es más joven (algo que tampoco acaba de gustarme demasiado, ya que ves a niños encerrados en sus cuartos en vez de salir a jugar a la pelota entre amigos).

Que no jueguen con vuestro criterio, que no os generen necesidad donde no existe. Usad internet, no lo consumáis.

Gente viendo vídeos de Youtube (sátira)

1 comentario:

  1. Un buen artículo dedicado a la baja calidad de las redes, aunque es bueno contar también con las excepciones, como tu blog por ejemplo. Un abrazo Amigo. Nos leemos!

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