Luis Suárez muerde otra vez.

Se me hace extraña una situación en la que deportistas en plena competición se líen a bocados entre ellos... de hecho, la única vez que llegué a ver esta actitud tan inconsciente fue en el combate de boxeo entre Mike Tyson y Evander Holyfield. En ese combate, Tyson arrancó parte del cartílago de la oreja externa de Holyfield de un bocado. El púgil fue suspendido y perdió el cinturón de campeón mundial de pesos pesados...

Fue el 28 de Junio del 1997. La imagen dio la vuelta al mundo convirtiéndose en un escándalo.

Ayer, 24 de Junio del 2014, Luis Suárez, jugador de fútbol uruguayo, mordió a un rival en el partido que enfrentaban Uruguay contra Italia en el mundial de Brasil.
El incidente podría no parecer tan grave al no haberle arrancado ningún trozo de carne al rival (que ya sería lo único que faltaría), pero la realidad es que este jugador ya es reincidente, pues no hace mucho, con su club, el Liverpool, ya mordió a otro rival provocando su expulsión.
Pero es que esta no es la segunda vez que se lía a bocados con los rivales, es la tercera ya. Y por ello, la FIFA (que no es tan permisiva como la UEFA [claro ejemplo está en Pepe, jugador portugués que no pudo jugar el último partido con su selección por expulsión directa]), le ha abierto expediente y se espera una sanción ejemplar (Suárez podría quedarse sin jugar más en este mundial 2014).

El jugador le quita hierro al asunto diciendo que son cosas del fútbol, que son reacciones que suceden constantemente dentro del terreno de juego. Pero agresiones de ese calibre solo las he visto en jugadores desquiciados que más que jugadores son un peligro físico para el contrario. Jugadores como Pepe (Kepler Laverán Lima Ferreira) o Javi Navarro. Sí, estos dos últimos más agresivos y despiadados que el primero, pero el primero muestra una conducta infantiloide o de pachanguero de barrio turbio al proyectar su rabia sobre los rivales de ese modo, y no olvidemos que hablamos de jugadores de talla mundial.

Por su parte, la federación uruguaya de fútbol junto con la prensa del país han presentado un recurso alegando que la fotografía mostrada a la prensa mundial ha sido manipulada con photoshop y que las marcas de dientes en el hombro de Giorgio Chiellini son cosa de retoque fotográfico, y muestran la misma imagen sin esas marcas.
Desde el otro lado del Atlántico muchos dudamos de la veracidad de la fotografía que muestran desde Uruguay, ya que conocemos el talante de Luis Suárez, la foto fue tomada y distribuida por un reportero japonés (sin intereses aparentes) y la sanción se aplica (o aplicará) por la acción, no por la marca que deje esta. De todos modos, quien debería aportar el dato de si vio o no vio marcas sobre el hombro del jugador italiano es el árbitro, que estaba allí mismo, sobre el terreno de juego, y debió ser quien así lo indicara en el acta arbitral.

Por lo que, aun a la espera de que se sepa una sanción, desde aquí lamento públicamente estos actos de agresión y conducta antideportiva en cualquier deporte. En el deporte las máximas que hay que seguir son el juego limpio, el respeto al rival y la competitividad, pero sana, siempre desde el respeto. El deporte debería servir para unirnos a todos en una fiesta, no separarnos en banales disputas.

Meme tomada de studiofutbol.com.ec