miércoles, 27 de noviembre de 2013

Los españoles estamos aprendiendo a salir de la crisis:

Antes que nada debo dejar claro que cuando digo "los españoles" no incluyo a los políticos ni a la familia real.

Cuando hablo de españoles hablo de gente que ha luchado día a día por conseguir un trabajo por muy costoso o desagradable que le pareciera. Gente que se ha dedicado a buscar y rebuscar entre montones de páginas web de empleo, anuncios en los diarios, gente que se ha dedicado a pegar carteles por toda la ciudad anunciándose y que se han movido para lograr tener algo, por muy poco que sea, por muy duro que sea y por muy deplorables que las condiciones sean en comparación de las que en momentos de abundancia pudieran existir.

Con nuestro esfuerzo y dedicación, luchando muchos hemos encontrado trabajo. No nos hemos quedado estancados, ni nos han desalentado las pésimas noticias que a diario salpicaban las pantallas de televisión, internet o los diarios. No. Nos hemos inflado de valor y voluntad y hemos continuado buscando hasta lo más profundo de las entrañas de este país para encontrar trabajos nuevos que nunca antes habíamos probado o en los que no esperábamos vernos.

Por dejar de pensar en ese "ese trabajo no es para mí" muchos hemos conseguido sobrevivir. (Nos hemos adelantado a los 5 millones de parados). Sigue siendo una cifra alarmante (y deseamos ante todo que todos pronto podamos gozar de trabajo estable y sin sobresaltos, pero eso ya es harina de otro costal), sin embargo esa voluntad de querer salir del pozo nos ha llevado a desgarrarnos uñas y dedos para trepar hasta ver un poco de luz.

A los que siguen buscando trabajo les diría que no se desanimaran, que trataran por todos los medios que sus fuerzas no desfallecieran, porque detrás de la larga retahíla de "noes" se esconde al menos un sonoro SÍ. Es cierto que en otros tiempos lo tuvimos todo hecho, pero es ahora cuando tenemos que aprender pronto de la situación y darle la vuelta, usarla en nuestro favor. ¡Y lo estamos haciendo!

Está resurgiendo un positivismo y un optimismo que se refleja en los mercados. Las inversiones y las compras constantes gracias al optimismo generado por el descenso del paro, por un lado, el gasto en lo importante y ahorro de gastos innecesarios por otro, ha impulsado a la alza los índices bursátiles en primer lugar estadounidenses y como reflejo de ello, el resto de bolsas del mundo.
Hoy el Ibex35 cerraba su quinto día consecutivo de ganancias. Casi alcanza ya los 9.900 puntos (llegamos a caer por debajo de los 7.000 habiendo llegado a récord histórico de casi 16.000 antes de la crisis).

A los que aun no tienen trabajo, os digo que no os desalentéis, que sigáis buscando y que tratéis de abarcar más profesiones, incluso aquellas que jamás pensasteis. Si lo que queréis es continuar en España y ver si la cosa cambia, entre todos podemos hacer el esfuerzo y cuando le demos el vuelco, ya podremos volvernos de nuevo más selectivos.
Si no os importa mucho donde estar y queréis un trabajo, también os digo que es una buena oportunidad de probar la experiencia en el extranjero. Todo suma, y sabemos que en este país todo lo que viene de fuera parece mejor, se le da un valor añadido (coches alemanes, trajes italianos, chefs franceses, tecnología japonesa, economistas estadounidenses...). De todos modos deberíamos empezar a querer un poco más lo que tenemos y lo que hacemos, incluso luchar por mejorar si es lo que queremos, en vez de alabar tanto la grandeza exterior, tratar de luchar por ser nosotros el referente.

A los empresarios, creed y cread, el dar oportunidades da rendimiento, el rendimiento genera optimismo, el optimismo consumo y el consumo, oferta, la oferta demanda y la demanda da trabajo y vuelta a empezar.

2 comentarios:

  1. Y digo yo,si el empresario no puede creer ni crear,si al empresario no se le dá las oportunidades y por lo tanto no genera rendimiento .....es justo que creamos que el empresario no genera optimismo ? es justo que todo aquel que empeñó su vida por un proyecto ,dejó su huella en el esfuerzo y en el insomnio,tenga que acarrear con aquellos que esperaron a que otro tirase para adelante? El empresario también es la PYME que vive ahogada por impuestos ,con puertas cerradas de bancos , al cual le cuesta un gran esfuerzo generar ese antídoto "el optimismo"
    UN SALUDO

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    1. Claro, el empresario que no pueda con su negocio no podrá seguir girando en la cadena de producción, que gira con la fuerza de nuestro trabajo y cuyo eje (presupuestos gubernamentales y bancos) ha sido tan desnivelado que ese mismo empresario no puede esperar nada del eje. Pero si como he dicho se monta una cadena al margen del eje las posibilidades de seguir a flote crecen aunque sean en un 1'2%. De todos modos yo incito a la PYME con suficiente capital como para invertir una mera cantidad de 50 euros mensuales en impulsar su negocio con cabeza, ideas nuevas, y desviar el consumo y al consumidor del objetivo de las grandes multinacionales globalizadoras. Ahorrar en gastos que se puedan eludir e invertir en proyección e impulsión. Y recordar al consumidor/usuario que nosotros somos la parte más importante de la cadena y nosotros elegimos dónde hacer fuerza.

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